Bienvenidos Letrados Todos! :D

jueves, 5 de junio de 2008

Futuros Letrados: Estimados Apaticos, Jovenes Confundidos, Dormilones y Activistas. Presente dos puntos...

Se supone que hablar sobre los sucesos contemporáneos cuando somos parte de ellos, hace todo más complejo. Pero esta vez necesito un poco de esa euforia pasajera para ver si, al menos con eso, remuevo un par de conciencias.
Son exactamente las 10:45 A.m. del segundo día de nuestro paro. Las causas las conocemos, más aún los que fuimos protagonistas de los primeros pasos de la resistencia estudiantil. Hoy soy estudiante de letras de la Universidad Católica de Chile, nada mal para lo que aspiro como humanista, sin embargo, me avergüenzo.
Me avergüenzo y este termino no pretende crucificar a nadie, solo transferirle con toda humildad la pena que me da ver como manifestamos nuestro descontento SOCIAL, en una universidad CATOLICA, los JOVENES que en el mañana tendremos la maravillosa labor de REMOVER CONCIENCIAS o INCULCAR VALORES a futuros ciudadanos. Es una paradoja.
La vida es una real paradoja, vasta dejar el teclado de lado y escuchar a no más de veinte letrados haciendo bulla con piedras y botellas.
¿Qué porque no estoy afuera? Yo también me lo pregunto. Pero creo que mis objetivos son distintos, mis miras van a que alguno de ustedes en un momento de ocio, o cuando pepe grillo les recuerde su existencia, lea esto y sepa… que no vamos bien.
Me da pena que el accionar sea de unos cuantos, que son una fracción de los que ayer dijeron si, y hoy están sentados en primera fila de las butacas, al frente de los profesores que tenían la esperanza de no hacer clases hoy, se los aseguro. Me da pena que para el sistema que hoy nos acongoja seamos un número más y ¡ui! Como nos importa, pero no les importa quedarse hoy en cama sabiendo lo valioso que es ese NUMERO MAS para manifestarse… cuan valioso es cada uno de los pocos.
Me da pena haber escuchado un si y un vamos, los mismos SI que veo hoy esquivando miradas…
La apatía es algo que aprendí a aceptar, no hay nada más triste y normal que un radiante joven que se ríe a lo lejos de los procesos sociales, y le importan de verdad una real lenteja. Ya acepte mirar a en sus ojos NADA de interés, y ver su orgullo por que osea, en verda, no le importa naa, en verda que lata. (no se imaginan cuanto me reprimo al escribir esto, pero vasta con decirle , queridos compañeros, que en otras instancias mis adjetivos serian mas radicales).

Pero algo que aún me molesta, y no dejara de hacerlo, es la nula coherencia y representatividad con los valores básicos ciudadanos. Queridos, todos tuvimos la oportunidad de votar, un si o un no, hasta los que no votaron, no hicieron nada por revertir el 1/6 necesario sobre 110 votos para el SI.
Queridos apáticos, solo apelo a que para la próxima tomen conciencia por los que si respetamos los acuerdos con la comunidad. Y que se den cuenta, ¡uf! De cómo quedamos los novatos de letras en esto… mal..
Y lo que más me importa comunicar, con conciencia inocente y sin ánimos de crucificar a nadie, solo recordarte amiga o amigo, que cuando dices si, yo avanzo contigo, pero si te alejas en la penumbra, caemos solos. (la incoherencia es como una vergüenza que se carga mucho tiempo queridos)
En otras palabras, si no están dispuestos a proseguir con las consecuencias de su voto… NO PROMETA y si no quiere asumir consecuencias ACTUA.

El hecho de decir las cosas suavemente hace que me extienda un poco. Mis disculpas por eso.
Y las pertinentes por ortografía y redacción.
Si esperaban algo más radical les digo que, aún quiero seguir siendo su compañera de letras por los años que siguen, y que mis suaves palabras contienen la esencia de mi rabia.

Saludos compañeros letrados y letrados del FUTURO.
FrAn.

p.d.: vale mencionar a los compañeros que conmigo miraban con asombro. Los felicitos queridos, aún quedamos algunos. resistencia =D

8 comentarios:

dominga dijo...

a mí lo que me llama la atención es la poca solidaridad que existe por parte de los compañeros qu estan en contra de las movilizaciones.
Si el CEL pide expresamente que no se asista a clases en caso de no adherir al paro, es bastante poco sensata la actitud de quienes de igual manera van.
Claramente los objetivos de las movilizaciones en sociales no son encapucharse y tirarle piedras a "las eshtructurash neoliberalesh en la alameda", sino concientizar a una masa estudiantil lamentablemente aturdida por un contexto que no ha sabido remecerla.
La U, ya es anacrónica y reaccionaria. Con el plan Rosso, probablemente lo podría llegar a ser aún más. Lo descepcionante es que en instancias de cambio, lo sean sus alumnos.
A titulo personal, no me identifico con la totalidad de las demandas. Pero si creo en mis compañeros consecuentes, bastante menos pusilanimes que yo, los admiro, y los apoyo. Una pena que el resto tenga intereses tan básicos e individualistas como "el texto de chomsky" en un contexto como el actual
Saludos.

dominga dijo...

Fe de erratas: Movilizaciones en Humanidades

chica mandarina (con interior azul) dijo...

Queridos novatos:

Escribo este post humildemente como persona natural y no como integrante del Centro de Estudiante de Letras, aún cuando sobre mi posición ahí también tengo mucho que decir al respecto.

Dudo que le importe a alguien, la verdad ya ni siquiera a mí me importa. En mi último año de carrera decidí junto a mis compañeros ser parte del CEL para ver si podíamos cambiar las cosas, si podíamos hacer funcionar en Letras eso que a veces parece no existir: la participación. La situación para el año que se nos venía no se veía tan mal, teníamos y aún se conservan, miles de proyectos que se han llevado a cabo y que prontamente estarán a la vista de todos, pero nos topamos en el camino con los problemas de la educación, con una comunidad de estudiantes apática y con condiciones muy poco cristianas para muchos.

La asamblea decidió que la solución era sumarse al paro y exigir derechos, a la votación se invitó a todo Letras, participaron 200 personas, 150 a favor. El paro se hizo, con no más de 15 personas activas y unos pocos más que iban y venían en los debates y en las actividades que difícilmente se pudieron hacer. No sé por qué en un momento pensé que los novatos eran nuestro verdadero motivo por el cual movernos, tal vez porque nosotros nos vamos y es necesario que alguien siga el legado, tal vez porque mientras pasan los meses, como dijo un amigo, en Letras la gente se vuelve más invisible. Sea lo que sea, fue un error y lo lamento.

Está demás decir que todo lo que se intentó hacer fue en gran parte por ustedes y por la gente que no puede pagar la universidad y ahora está teniendo una pésima educación secundaria. No funcionó como debió haber funcionado, en parte me alegro por la mayor cantidad de la gente: ahora pueden seguir yendo a sus clases y seguir regocijándose en las mediocridades del país.

Como persona natural, me sumo a la opinión de la chica que subió esta entrada, me avergüenzo de estudiar en la universidad católica, aunque sea la quinta mejor de iberoamérica.
Como parte del CEL, me prohibo volver a creer que puedo hacer algo más que dar becas, financiar revistas y solucionar pequeños problemas académicos. De todas maneras, no dudo en la capacidad de confianza de mis compañeros de labor que probablemente sigan luchando porque esto mejore a pesar de los obstáculos... Pero después de hoy, yo, Mariana Valenzuela, me bajo. Nos trataron de flojos, de lava cerebros, de sin sentido, de inútiles, de violentos, de rotos y otros adjetivos curiosos que yo, por mi parte, no voy a soportar y menos por 150 personas que votaron al favor del paro y no aparecieron nunca.

Insisto, igual que la chica anterior, la idea no es atacar a nadie sino expresar un sentimiento que probablemente se comparte con las personas que trabajamos a conciencia en esto. Nunca pensé que iba a decepcionarme tanto de una universidad, de mi universidad.
Y si se los digo esto es porque desde el primer día en que compartí con ustedes me encariñé con muchos y porque yo y mi centro de estudiantes les prometió que ibamos a hacer lo mejor posible nuestra pega, por ustedes.

Les deseo, a pesar de todo, la mejor de las suertes en esto que se atrevieron a emprender, lo que puede aprenderse en Letras es más de lo que cualquier persona podría creer que va a encontrar en un libro. Aprovénchenlo.

Saludos
Mariana (o Maña para los conocidos)

Anónimo dijo...

Parte de mi temor se hace verdad en tu testimonio.
Ojala jamás me canse.

Tus palabras, dan fuerza.Gracias por la gotita de esperanza.

Fran.

La niña que escribió la entrada.

Nachitaxxx dijo...

Mmmm... No tengo mucho que decir. Me duele la opinión de la Maña, y la entiendo perfectamente. Yo quizás si seguiré luchando, llevo años en esto, intentando tantas veces poder cambiar, arriesgando cosas tan trascendentales como una prueba o una nota (já), en pos de lo que para algunos es mucho más trascendental, que son las ideas que nos mueves a ser estudiantes. Ojalá antes de que salgan de la carrera entienda la gran mayoria que no van a la u a que les vomiten información en la cabeza, todo eso lo pueden sacar de un libro, de las clases de alguien más, de un apunte. Pero lo que se aprende discutiendo, debatiendo, leyendo por cuenta de cada uno y sobre todo logrando cosas es algo de lo que en realidad vale, es algo que le da sentido a pasar por la universidad. Tienen derechos ahora, cabros, tienen el derecho de poder levantarse y decir lo que piensan. Pero si en lugar de eso quieren ir a clases... es desición de uds. Ya son mayores de edad y pueden hacer lo que quieran.

Muchos saludos.

Celeste dijo...

Qué lata la decepción, cuando realmente no se ha preguntado el por qué de las cosas. Finalmente, mi única gran opinión se resume a que respetemos las decisiones y opiniones de los demás.
Como dijo Andrea, la realidad es un texto. Así, tiene coherencia, sohesión, puede ser criticado y analizado. De a misma forma, puede ser visto desde distintos puntos de vista.

Personalmente, apoyo con todo mi ser las causas por las cuales se está peleando; porque son importantes, distan de ser infantiles, se tienen propuestas, etc.

A veces sería bueno detenerse a conversar con las personas, antes de recriminarlas por sus actos, antes de presuponer el por qué de las actitudes, y antes de tacharlas o estamparlas con algún estigma.


Por el momento, mañana suspenderemos la prueba de Universal, según acuerdo de los que respondieron (mandamos mail masivo, ya que la mayoría son de otras carreras).


Saludos, compañeros.

Anónimo dijo...

Concordando profundamente con la fran, lo único que me queda por agregar, es que ni ella ni yo estamos aquí para crucificar ni atacar a nadie, sino para formar un poquito de conciencia que parece hacer falta, y para hacer una crítica a lo que más parece abundar en este grupo social al que ya no importa si llamar estudiantes de letras, novatos, futuros letrados o grupo de jóvenes apáticos como ha decidido hacerlo la fran (muy acertadamente).
Personalmente, no tengo ningún problema ocn la apatía, la flojera o la confusión, como se caracteriza al grupo social al que iba originalmente dirigida esta entrada; creo, sin embargo, que el mayor problema que encontramos es LA INCONSECUENCIA.
¿No es inconsecuente apoyar la democracia y no respetar las decisiones tomadas democráticamente, solo por no estar de acuerdo con ellas, asistiendo a clases?
¿Acaso si no nos gusta el presidente que elige la mayoría en nuestro país, de forma DEMOCRÁTICA, vamos a desconocer su autoridad?
Entonces, ¿estamos de acuerdo con la democracia cuando nos conviene? Así no funciona señores..
En segundo lugar ¿Acaso votar a favor de una movilización y no ser capaz de movilizarse de la propia cama, no es ser inconsecuente?
Echar puteadas contra el rector en el recreo, en la u o en la asamblea es bastante facil, igual de fácil que votar por un paro y quedarse viendo tele. Ahora, cuando se trata de lo que realmente importa, ejercer presión estando presente, no parecen alcanzar las ganas.
¿Decir que no opinamos, porque no estamos informados, sin siquiera aparecerse en una asamblea, no es inconsecuente también?
No es la flojera la que molesta, no es la apatía, son las promesas que no se cumplen, las palabras que quedan vacías, las afirmaciones que a la larga, se convierten en mentiras. No creo que tengamos problema aceptando el punto de vista de quién no está de acuerdo con nuestra visión de las cosas,no es un problema de tolerancia, o de aceptar la libertad de los otros y las razones que tengan para actuar de cual o tal manera, es un problema de gente que no actúa en consecuencia con lo que dice, de falsos discursos que a la larga no son más que mentiras.
Podría dar más ejemplos, pero creo que ha quedado bastante claro lo que quería decir.
Siendo un poco menos suave que la fran (la sutileza no es mi fuerte) y compartiendo el sentimiento de vergüenza con ella y con quienes hemos estado para ser testigos de la inconsecuencia y poca conciencia social de nuestros propios compañeros, me retiro y los invito a darse un paseíto por la conciencia y hacer lo que consideren correcto desde un principio.

Natalia.

Anónimo dijo...

Debo reconocer que al leer los comentarios me surgen sentimientos encontrados. Siento una extraña alegría de saber que no soy la única que siente pena y decepción.. Yo también me avergüenzo de estar en la "Católica"... Ya ni siquiera por el hecho de que voten que sí al paro y no vayan, sino porque hay que ser realistas: la mayor parte de nuestros compañeros no está ni ahí.. más de la mitad no fue capaz de votar.. ¿Qué no tenían tiempo? Tuvieron más de 8 horas para votar. ¿No están enterados de lo que se pide? Infórmence! ... No hay excusas..
No me motiva estudiar.. ¿por qué ir a clases cuando hay otros que están peleando por algo que nos atañe a todos? ¿Es más importante una nota? La típica frase: "sé que con letras no ganaré nada de plata".. si piensas eso, ¿cómo crees que educaras a tus hijos? ¿Dónde? Ojalá no quieran estudiar medicina en la católica..
De todas formas, lo que realmente quiero hacer es pedirle a aquellas personas que sí les interesa la educación de los chilenos (sí, la de todos) que no se rindan. Sé que muchos de uds llevan varios años acumulando desiluciones, pero no permitan que eso les gane.
No perdamos la esperanza. Si no luchamos por lo que creemos justo, entonces la vida no tiene sentido.

Ánimo